REMENDANDO REDES

REMENDANDO LAS REDES

Proverbios 28:21
«Hacer acepción de personas no es bueno».

Nosotros creemos que toda persona, cristiana o no, es de igual valor para Dios y para su Reino. El apóstol Pablo decía: «en todo y para todo he sido enseñado, sé tener abundancia y sé vivir en escasez, porque todo lo puedo en Cristo que me fortalece».
Y como el apóstol, aprendemos que cada ser humano tiene un valor eterno para Dios, por lo tanto, si queremos trascender como líderes, tenemos que valorar a cada persona, como Dios lo hace.
El corazón que valora y ama a las personas es como un imán que atrae a la gente y en la Iglesia esto produce que los que se fueron vuelvan, que los que están crezcan y los que nunca iban a ir vayan.
Como integrantes del cuerpo de Cristo también creemos que la obra victoriosa de la Iglesia se hace en equipo; es tiempo de decirle basta a los llaneros solitarios, basta de individualismos. La mejor manera de llevar nuestra vida con éxito es trabajando en equipo.
El diablo es basura y nos quiere tener bajo prèsión haciendo que las cargas que tengamos las llevemos solos, por ejemplo en nuestra casa.
Dios nos ha llamado a lograr cosas tremendas, no sólo en lo espiritual sino en lo que atañe a lo laboral, en lo familiar, en las empresas, pero no solos sino en equipo. Debemos aprender y enseñar a trabajar en equipo.

ORAMOS
«Señor Jesús, tú amas a todos por igual, y no haces acepción de personas y ese amor lo haces extensivo hasta la eternidad. Enséñame Señor, como lo hiciste con el apóstol Pablo, a amar y valorar las almas como tú lo haces, y a trabajar en unidad con ellas, porque sé que tu corazón se contentará y lograrás tu propósito en tu iglesia. En el nombre bendito de Jesús. Amén y amén.»